SIN NORTE CLARO

Fotografía: Futbolred.com - Casa Editorial El Tiempo

Millonarios perdió de local contra Junior 2 por 1, en un partido que servía de termómetro. Se siguen repitiendo errores y perdiendo puntos.

Millonarios regresaba al Campín luego de su juego contra Tolima en condición de visitante. El equipo no ha sumado suficientes puntos en la tabla, sumado a la irregularidad en el juego, situaban al ‘embajador’ en una situación donde se veía obligado a enderezar el camino. Varios cambios como la inclusión en la titular de Jacobo Kufaty y Eliser Quiñones, sorprendían de entrada.

Millonarios salió por el partido y, francamente, no lo hacía mal. El equipo abría el juego, buscaba por las puntas, tenía el balón e iba hacia el frente. Junior por su parte esperaba al local, pero no se recostaba en exceso atrás, ocupado espacios y cerrando lugares de juego. El visitante poco tenía el balón y Millos controlaba, hasta que en el minuto 8, luego de un cobro de tiro libre que fue desviado por Domínguez, balón que impactó en el poste, Gómez con la portería a su merced anotaba el 0 a 1.

¿Justo? En el fútbol no hay justicia y Junior, como equipo eficaz, cobraba la primera que tenía para irse arriba en el marcador. El gol no afectó  la propuesta y Millonarios buscaba con fuerza el gol, jugando con la intensidad propia de un partido en una instancia final. Al 18 y al 20, dos llegadas a cargo de Riascos y Duque mostraban las intenciones del equipo.

Con los cambios, Millos atacaba por las puntas con Mosquera y palacios (Derecha) y con Banguero y Eliser (Izquierda). Kufaty llegaba por el centro y Duque apoyaba las llegadas. Domínguez se quedaba como eje y Riascos se movía por el frente del ataque. Lo anterior en teoría es interesante pero en la ejecución Kufaty con un nivel bajo, Eliser con altibajos y en ocasiones las subidas de Palacios dejaban espacio libre a Chará para las salidas rápidas.

Y fue en una de esas salidas donde creó Chará una jugada tan clara que es inexplicable como James Sánchez no anotó el segundo gol. Sí, a los 25 nos salvamos del segundo. El equipo jugaba con las líneas arriba arriesgando todo en busca del empate. El primer tiempo fue una búsqueda que dejaba poco a poco el orden y se basaba más en embates cimentados en ganas. Mosquera lograba desequilibrar pero sus centros no encontraban receptor y de nuevo la falta de eficacia pesaba. El primer tiempo terminó 0 – 1.

Para el inicio de la segunda etapa, Russo envió 2 cambios: Salieron Quiñonez y Kufaty e ingresaron Rojas y Maxi. Pueden existir opiniones divididas en cuanto a estos dos cambios, pero personalmente hubiera solo hecho el de Kufaty que no estaba aportando. Quiñonez era irregular pero apoyaba el retroceso yen salida rápida podía ser importante, pero el DT consideró que para él también había terminado el partido.

Junior, sabiendo que Millonarios iría en búsqueda del empate, replegó líneas y se enconchó, apostando al contragolpe y entregando la iniciativa a Millonarios. A los 3 minutos de la segunda mitad, Mosquera en un remate de larga distancia abría las acciones, mismas que llenaban de ilusión sobre un potencial empate, pero esa ilusión poco a poco se fue quebrando.

En los momentos más difíciles, un equipo debe seguir su plan de juego sin dejarse llevar por la emoción, ya que eso le resta a la táctica y es el mejor momento para cometer errores. Y eso, precisamente eso le pasó a Millonarios ya que el equipo se lanzó con desespero a buscar el empate y en la cancha se veían un conjunto de esfuerzos desordenados donde el ánimo le ganó campo a la táctica. Russo no encontraba solución ni podía darle manejo a la situación, misma que se agravó en el minuto 54 cuando Riascos salió lesionado, entrando en su lugar Ayron del Valle.

El desespero, las subidas desembocadas, el adelantamiento de líneas y la falta de una táctica clara estaban cocinando un peligroso coctel perjudicial para el embajador. Y al minuto 73 lo que nadie quería: Un pase largo a Chará, carrera larga con Cadavid, un enganche hacia adentro que dejó a Cadavid tirado y un muy buen golpeo de balón para el 0-2. Todo el conjunto de fallas fueron capitalizadas por uno de los mejores jugadores del campo y, ahora, con una desventaja de 2 goles todo pintaba aún peor.

Con defensas cerradas, lo mejor es probar en la larga distancia, pero ojo, no se debe abusar de este recurso para no desgastar la creación de juego y ser muy previsible para el rival. Al minuto 88, y luego de varios minutos donde Milos se acercaba pero no generaba peligro manifiesto en la portería de Viera, Matías de los santos sacó un disparo fortísimo para descontar en el marcador. Sí, la ilusión se encendía más allá de ver que Millos no creaba ni generaba peligro. La adición de 6 minutos, entregada por problemas en la tribuna sur, no fue suficiente y Millonarios selló su segunda derrota en condición de local.

Con piezas claves nuevas como un central y el lateral izquierdo es importante que el equipo tenga minutos, pero se ha entrado por parte del director técnico Russo en las rotaciones. Personalmente, no entiendo cómo con 6 fechas del campeonato tan siquiera se puede insinuar que hay desgaste, no entiendo. Además, niveles bajos de los jugadores y un sistema táctico que presenta fallas, hacen que Millonarios no sume, no tenga una buena cara y se empiece a ‘colgar’ en la tabla.

Todo lo anterior sumado a la poca gestión en los refuerzos ponen a Millonarios en una posición desfavorable. Ahora, personalmente no considero que con lo que hay hoy sea para ir tan mal y mostrar lo que se muestra. Millonarios necesitaba dos refuerzos de peso pero ahora el equipo no está mostrando un nivel medianamente bueno, todo esto aunado a que Russo recae en errores. ¿Preocupa? Sí, desde luego.

Los puntos son vitales pero hoy preocupa más el juego, el ver que no hay estabilidad en la nómina, ver que la defensa sigue con problemas de sincronización evidentes, percatarse que los problemas en el retroceso son más evidentes y que los relevos defensivos, que en el semestre pasado se hacían con eficiencia, hoy fallan y dejan boquetes en defensa que los rivales identifican y aprovechan. Otra mala noche y otra derrota, una que duele y mucho.

Lo bueno, lo malo y la figura

Lo bueno: Hoy no se destaca nada del equipo.

Lo malo: La derrota, segunda como local.

La Figura: Elección desierta.

Lo que viene

El miércoles la “revancha” del partido de hoy, también en Bogotá pero ahora por Copa Águila. Hay mucho que mejorar y es momento de cambiar esta mala racha. El equipo no puede seguir regalando ni puntos, ni partidos, ni prestigio, ¡Es suficiente!

¡Vamos Millonarios!