Es hora de decidir

Fotografía: Casa Editorial El Tiempo - 2018

  

Hoy se selló un empate más en casa, 2 puntos perdidos en el último minuto del juego por una desconcentración infame esta vez hacia Jaguares. Pestañear en el final del partido nos vuelve a costar caro y es momento de replantear muchas cosas que se vienen haciendo en el club.

Primer tiempo sin claridad.

Millos empezó buscando el resultado pero sin claridad, apostando mucho al pase largo siendo presa fácil de la defensa de Jaguares. Se intentó por los costados, pero un fútbol lento, predecible y sin explosión enterraba a Millonarios en las 2 líneas de 4 que los visitantes montaron.

Montoya, quien era quien debía generar fútbol no tenía claridad y perdía con facilidad el balón, jugado de forma lenta y predecible. Henry Rojas poco fue de apoyo por sus constantes malas entregas de balón, dejando en a la mitad de nuevo a Duque, quién se batió como un león recuperando y dando un poco de claridad en medio de la confusión. Ayron del Valle se salía mucho del centro hacía los costados buscando el balón, que no le llegaba y Huérfano con Quiñonez no daban soluciones en los extremos.

Si bien Jaguares poco atacó, cuando apostaba al contragolpe siempre tomaba mal parado a Millonarios retrocediendo. Esa solidez defensiva que dio tan buenos réditos en el semestre pasado, se perdió en este campeonato y cuando el equipo defiende se desordena con mucha facilidad. Un primer tiempo liviano y sin exigencias apra el rival derivó en un 0 a 0 más que jsuto

45 minutos con otra actitud, pero…

El segundo tiempo inició con un cambio, ingresó Carlos López por Eliser Quiñónez. Ese cambio y otra actitud y movilidad dejaron ver a un mejor Millonarios. Montoya, más participativo y con mayor precisión en los pases empezó a construir más juego, abriendo por las puntas con Palacios y Banguero, que estuvieron acertados en las subidas al ataque.

López por derecha apoyó a Palacios y ese extremo generó más peligro, dejando a Ayron en el centro donde es realmente peligroso para el rival. Llegadas, centros  remates de larga distancia dieron volumen de llegada y de peligro, convirtiendo a Ramos un par de veces en salvado del visitante. A los 16 minutos del complemento, un mal movimiento de Montoya le generó una lesión y tuvo que ser relevado, ingresando al campo el joven Orles Aragón.

El ímpetu del Millos y un poco más de orden le dieron su premio, cuando en un excelente centro del recién ingresado Aragón fue cerrado por Ayron para el 1 a 0, por fin. Un gol gritado y celebrado por las necesidades de un equipo que está en la parte baja de la tabla y debe sumar para meterse entre los 8 mejores.

Millos siguió atacando pero, ahora, Jaguares buscó salir más y de nuevo los errores en defensa y en retroceso dejaban muy expuesto al equipo en defensa. Huérfano se retiró y se dio ingreso a Carrillo para proteger más el resultado, en un momento donde el rival tomó más el balón y Millos no encontraba soluciones.

Pero al cumplirse el tiempo regular, en una salida de Millos Jaguares tomó el balón, hizo un lanzamiento largo tomando la defensa mal parada y dejando al delantero rival en una posición ideal, Fariñez tuvo que salir a cerrar, llevándose lamentablemente al rival, cometiendo falta en el área. Parecía increíble que, nuevamente, un partido quedaba al borde del colapso por un error de concentración que se pagan caros y que el equipo viene cometiendo reiteradamente.

El cobro de Rojas se coló por el palo izquierdo de Fariñez, decretando el empate 1 a 1. Un partido donde por errores evitables se iba todo al traste. El desorden que tiene Millonarios en su juego, de nuevo, hacían que perdiera puntos de local poniendo más ‘cuesta arriba’ la clasificación.

Falta de juego y falta de DT

Estaremos de acuerdo en tener gratitud con Miguel Ángel Russo por las alegrías que nos ha dado. Tampoco nadie discute que Russo es un tipo responsable y trabajador y mucho menos que fue un verdadero valiente al asumir el reto mientras pasaba por una penosa y muy delicada enfermedad. A él, gratitud solamente.

Pero lamentablemente un nuevo problema de salud lo atañe y no ha podido estar al frente del equipo e Liga. Gottardi hace lo mejor que puede pero es claro que él es un buen asistente pero que no tiene la trayectoria y el conocimiento pleno del cargo de director técnico. Sus constantes errores, lso desordenes en defensa y retroceso, los cambios tardíos y hasta malos planteamientos encierran un problema más que evidente. Sí, con Gottardi se han ganado algunos puntos, pero en general el manejo no ha sido bueno.

Desde esta esquina de opinión deseo, quiero y anhelo ver de nuevo a Russo en el banquillo azul dirigiendo al equipo. Él demostró con creces que no solo le dio un estilo a Millonarios, sino que ese estilo y su trabajo serio y responsable, desde luego junto a su cuerpo técnico, ya le dieron dos títulos a Millonarios. El capitán del barco no está y no se puede dejar a la deriva. Aclaro, de inmediato, que no ‘pido cabezas’, no es la idea ni sería bueno, lo que si creo oportuno es nombrar un director técnico durante la recuperación de Russo y que Gottardi y Cinquetti sean un apoyo para el timonel que llegue de forma interina.

Por supuesto hay otras soluciones pero propongo, con respeto, la solución anteriormente mencionada para que al equipo se le dé, desde el conocimiento de un director técnico, el trabajo que el actual campeón necesita. No dudo que mucho de esto dependa de Russo e insisto, o se pide ninguna renuncia de nadie, pero si debe llegar una persona que asesore a Gottardi, urgente.

Dentro de la crisis futbolística y de resultados que atraviesa Millonarios en este semestre, se destaca la autocrítica de jugadores y el cuerpo técnico. Aceptar el error es el primer paso para mejorar, estamos de acuerdo, pero se viene aceptando el error desde hace varias fechas y poco cambia, se necesita algo más. Es momento de tomar soluciones y de pensar en el equipo, de brindar la asesoría que se necesite y sacar a Millos de ese agujero futbolísitico y táctico en el que se está.

En todos los campos de la vida llega el momento en el cual las personas y las organizaciones deben tomar decisiones para revertir resultados negativos, ese momento llegó a Millonarios. Hay tiempo, pero hay que hacerlo ya.